Raconto
Llegaste hace mucho, por ahí por el 2002, bueno, siendo exactos fue antes, pero para mi fue por ahí. Yo venia desarmado, tu menos. Y ahí estábamos, entre cafés dulces e imitaciones de vida en pareja para jugar un rato. Luego el juego transfiguro en realidad. Yo dubitativo, tu con convicción, comenzamos a construir algo. Paseos, correrías, sonrisas tímidas pero hermosas. Y la sala de Bachillerato.
Al cabo de tres meses, equivoque el camino queriendo evocar fantasmas del pasado. Tu entendiste, perdonaste, aceptaste y le diste pa´delante again. Fue en ese instante en que recién vi a la mujer que tenia a mi lado. Una gran mujer... se podrá decir que ahí me enamore de ti. Con ese pequeño acto. Seguimos adelante, ya nos amábamos, eramos pareja, compañeros, amigos... nos apoyabamos, yo con tus contradicciones vocacionales, tu con mi loca familia. A ratos pensábamos que tu partirías, pero eso parecía lejano.
2005, egreso, planes a futuro. Pareja consolidada que se proyecta, vive en el futuro, escoge nombres para sus hijos, discute con pasión sobre su tipo de educación y de lo complicado que iba a ser tener dos papas sociólogos. Nos reíamos con nuestro futuro. Yo trabajaba, tu con tu tesis, vacilabas entre trabajar o estudiar. Vacaciones a escondidas en el Valle del Elqui y La Serena, hermosos momentos. Pasadas por lugares, yo me mudo, me voy solo y tu ahí, acompañando, feliz por mis logros. Maravilloso
De pronto lo impensado. Tu viaje estaba próximo. 2007 y yo estaba en un bar. Me llamas y me cuentas que habías ganado tu beca. Palidecí, pero igual te felicite. De ahí a septiembre de 2008 el tiempo se fue rapidísimo, febril, lleno de melancolia por lo que venia. Nos despedimos, promesas mediante, amor eterno, fidelidad y errores. Y del resto no me quiero acordar. Me quedo con lo de antes, el pasado hermoso, el lejano. El reciente lo borro, lo olvido pero aprendo.
Resumo lo maravilloso, con lo escogí quedarme. Miles de fotos, tardes de otoño en siesta, veranos en tu casa o escondidos en el norte. Fiestas sorpresas, amigos, en fin, historias lindas de recordar.
Al cabo de tres meses, equivoque el camino queriendo evocar fantasmas del pasado. Tu entendiste, perdonaste, aceptaste y le diste pa´delante again. Fue en ese instante en que recién vi a la mujer que tenia a mi lado. Una gran mujer... se podrá decir que ahí me enamore de ti. Con ese pequeño acto. Seguimos adelante, ya nos amábamos, eramos pareja, compañeros, amigos... nos apoyabamos, yo con tus contradicciones vocacionales, tu con mi loca familia. A ratos pensábamos que tu partirías, pero eso parecía lejano.
2005, egreso, planes a futuro. Pareja consolidada que se proyecta, vive en el futuro, escoge nombres para sus hijos, discute con pasión sobre su tipo de educación y de lo complicado que iba a ser tener dos papas sociólogos. Nos reíamos con nuestro futuro. Yo trabajaba, tu con tu tesis, vacilabas entre trabajar o estudiar. Vacaciones a escondidas en el Valle del Elqui y La Serena, hermosos momentos. Pasadas por lugares, yo me mudo, me voy solo y tu ahí, acompañando, feliz por mis logros. Maravilloso
De pronto lo impensado. Tu viaje estaba próximo. 2007 y yo estaba en un bar. Me llamas y me cuentas que habías ganado tu beca. Palidecí, pero igual te felicite. De ahí a septiembre de 2008 el tiempo se fue rapidísimo, febril, lleno de melancolia por lo que venia. Nos despedimos, promesas mediante, amor eterno, fidelidad y errores. Y del resto no me quiero acordar. Me quedo con lo de antes, el pasado hermoso, el lejano. El reciente lo borro, lo olvido pero aprendo.
Resumo lo maravilloso, con lo escogí quedarme. Miles de fotos, tardes de otoño en siesta, veranos en tu casa o escondidos en el norte. Fiestas sorpresas, amigos, en fin, historias lindas de recordar.
Entropia
azar/destino,
pequeñas cosas,
She
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