Piedras
Hay gente que no aprende. O mejor dicho, habemos quienes nunca aprendemos. Pasamos chocando siempre con lo mismo, comentiendo los mismos errores, tropezando con las mismas putas piedras de siempre. Y uno, animal de costumbre, sigue recorriendo los mismos caminos plagados de esa piedritas con las cuales tropezamos. Quizás es por gusto, quizás somos obstinados, quizás por algún momento esperamos ahora si burlar la piedrecita. Pero el destino es implacable y siempre terminamos cayendo una y otra vez.Yo soy un tipo ingenuo, que cree que las piedritas no son malas, entonces les creo uno diez o mil veces, siempre esperando que esa piedra ahora si que si cambie de actitud y no haga lo mismo. Pero las piedras (como la gente) no cambian de un día para otro. Entonces, voluntaria o involuntariamente, nos terminan botando, nublando, complicando más de lo que quisieramos. Y yo, sesgado y cabeza dura, vuelvo al principio del camino para volver a recorrerlo. Y no aprendo mucho, sigo confiado en que la piedra no se cruce.
Y aquí sigo, recorriendo el mismo camino de siempre, en el cual ya he tropezado. Y las piedras dicen que cambian, pero no lo hacen. Las piedras son piedras siempre, entonces difícil que sean distintas. Pero yo, como crédulo que soy, les doy una nueva oportunidad, a pesar de que sepa que no han cambiado, a pesar de que sepa que no aprenden.... igual que yo.
Entropia
azar/destino,
la vida misma misma,
pequeñas cosas
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