Voladuras de verano

Uno de repente no sabe que hacer. Y es que uno intenta hacer de todo pa´que el techito que se voló en el invierno vuelva... y lo ata bien, lo asegura y lo cuida, pero de repente el techito quiere volver a volar, volver a irse y perderse tal y como lo hizo en ese frio invierno. Y uno no sabe que hacer pa´que no quiera volarse.

El viento (que todo lo empuja) hace pensar que el techito se volará, porque el techito extraña y extraña eso de ser libre y volar en circulos, en cuadrados y ser libre. Y uno piensa que en realidad el techito te cobija y que posiblemente podría echarse a volar con él. ¿Pero si el techito no quiere? Y es que el techito no es estable, y derepente parece que el techito esta bien en tu balcón y cobija bien y uno es feliz.

Pero derepente se suelta y tambalea en esos nudos tan frágiles. Y uno pone cara de pregunta (?) y no sabe que hacer.... ¿Lo vuelvo a atar o dejo que vuele y vuele? ¿Y si el techito no puede volar o, en realidad, no sabe si volar y quedarse?


Y ahí se queda uno poh... en volá de vodka pensando en que hacer con tu techito. Y piensa que derepente es mejor atarlo más, pero quizás sea mejor dejarlo y esperar... esperar a que los vientos terminen (que terminen de una vez!) y que todo esto no sea más que una bonita broma... porque no es más que eso, ¿cierto?

1 Response to "Voladuras de verano"

  • Anónimo Says:

    Bueno...tienes que darles tiempo al techito que se esta soldando a tu terraza. Para la proxima se volara con terraza y todo.