Arbol de Navidad

Durante esta semana arme mi árbol de navidad. No es que sea un hombre lleno de espíritu navideño, es más, no me mueve mucho esta fecha ya que en mi familia siempre se me dijo que la navidad era de los niños y el año nuevo para los adultos, y claramente ya no soy un niño. Pero si soy un tipo cabalero, entonces en algún lugar de mi cabeza se me ocurrió que el año pasado no había hecho árbol (de puro shoro no más) y entonces podía ser parte de mi nube negra. Entonces me lance a la búsqueda de mi antiguo árbol, algunos adornos que tenia y las luces.

Generalmente, el acto de armar el árbol de navidad es algo que se hace en familia. Entonces ahí están todos... el padre, la madre los niños y en mi caso también estaban los tatas. Y era un acto que a mi, como niño, me encantaba pues siempre significaba que para la noche buena faltaba poco. Entonces uno se ponía ansioso pensando en que si efectivamente mis padres habían hecho el esfuerzo con los regalos. Y digo mis padres porque, aunque ustedes no lo crean inexistentes lectores, no recuerdo haber creído en el viejo pascuero.

Entonces uno esperaba ansioso la noche del 24, pensando en los regalos, revisándolos uno por uno cuando los apilaban bajo el árbol, viendo para quien era el regalo más grande o quien tenia más regalos. Eso con el tiempo fue cambiando. Y es que eso de que "la navidad es de los niños" en mi familia siempre se sentía. Llegó un punto en que ya no me importo mucho, puesto que ya no recibía muchos regalos, salvo los típicos desodorantes o ropa interior, ni tampoco tenia como comprarlos. Y ya no me interesaba si había arbolito o no. Quizás había dejado de ser niño.

Volviendo a mi árbol propio, el armado de este fue distinto. De partida era yo, a solas con una cerveza en la mano y el "pulse" de Pink Floyd de fondo. Era yo y un pequeño árbol, un par de adornos y las luces. Y era yo no pensando en que faltaba menos para la navidad, ni yo pensando en cuantos regalos recibiría. Era yo haciendo el exorcismo de todas las cosas que me habían pasado, cosas que de pronto se veían alejadas detrás del árbol y sus 50 luces chinas. Era la navidad a mi manera, en mi casa... era mi particular forma de enfretar el rito familistico ahora en la soledad de mi "Comfortably Numb"

Tardé no más de 20 minutos en armarlo... luego lo contemplé y me pareció que era un árbol temeroso, esmirriado, escondido en un rincón. Era como si súbitamente el árbolito de navidad había cambiado de pronto su significado y ya no era felicidad, sino que más bien era mi excusa para no pasarla mal el 2010. Y era como que el árbol no quería ser esa excusa. El árbol de navidad no es más (ni menos) que eso, entonces se negaba, se empequeñecía cada vez más a ser lo que yo quería que fuera.

Y ahí esta en una esquina, esperando a tener regalos que no tendrá. Y no los tendrá porque no lo arme de puro espíritu navideño. Lo arme de puro susto a que el 2009 no se vuelva a repetir.

Los dejo con mi canción favorita de Pink Floyd que para mi tiene mucho que ver con mi "arbolito"


1 Response to "Arbol de Navidad"

  • Anónimo Says:

    Te quedó muy bonito el árbol...con las luces blancas,las pelotitas azules, y el playmóbil cruzado entre los otros personajillos. Todo un árbol de católica! Estoy segura de que el próximo año va a ser mucho mejor para ti...y así cada año te van a dar más ganas de armar el arbolito.